La conciencia plena es una de las tendencias de bienestar más populares, pero ¿qué significa vivir conscientemente? Una forma popular de explicarlo es prestar atención al momento presente sin juzgarlo. Suena bastante simple, ¿no es así?Pero la vida consciente no es algo que se tache de la lista de pendientes nada más así; es un viaje que requiere un enfoque momento a momento.

Por eso lo llaman práctica, estar en el momento presente es algo en lo que siempre debes trabajar. Si estás en búsqueda de maneras de ser más consciente en tu vida, te tenemos cubierto.

Consejos para ser consciente

Piensa en la conciencia plena como un músculo que ejercitas, entre más lo entrenes, más sencillo se vuelve. Ya que esta práctica se trata de estar presente y libre de juicios, no esperes la perfección de inmediato. Elige un lugar donde comenzar y pon manos a la obra con estos sencillos consejos para la conciencia plena.

Medita

La meditación es conciencia plena concentrada en donde te sientas tranquilamente y observas tus pensamientos. ¿Pero cuánta meditación es suficiente? Un proverbio Zen tiene el siguiente precepto: “Te debes sentar a meditar por 20 minutos al día, a menos que estés muy ocupado. Entonces debes sentarte por una hora.”

Dejando las bromas a un lado, no hay un tiempo establecido. Lo importante es encontrar lo que funcione para ti. Incluso un minuto de meditación te ayuda a estar consciente. Si eres nuevo en la meditación, usa estas ideas para comenzar.

  • Solo respira. En lugar de enfocarte en aclarar tu mente, intenta realizar algunas respiraciones profundas y deliberadas de manera periódica a lo largo de tu día.
  • Escanea tu cuerpo. Cada hora, pon atención a cualquier tensión y libérala, afloja la mandíbula, sacude tus hombros y relaja tu cuello.
  • Perfecciona tu práctica. Consigue algunos indicadores en nuestra guía de meditación para principiantes.
  • Crea el escenario. Da un indicio a tu mente de que es momento de meditar con una mezcla para difusor que uses solo durante tu práctica, te sugerimos los aromas equilibrantes y calmantes de Incienso, Lavanda y Ciprés.

 

Relájate y disfruta del proceso

Uno de los beneficios de practicar la conciencia plena es que puedes convertir tareas mundanas en algo satisfactorio, e incluso divertido. Encuentra maneras de saborear el proceso de una tarea en lugar de solo apresurarte a marcarla fuera de tu lista.

Ya que de cualquier manera tienes que preparar la cena, ¿por qué no comenzar aquí? Intenta pasar una noche enfocándote en el proceso de preparar los ingredientes, condimentarlos a la perfección y de emplatarlos como un profesional. Incluso si estás preparando una de esas cenas sencillas y para llevar, éste es el momento ideal para practicar el estar presente.

Minimiza las distracciones

No estamos diciendo que las distracciones siempre son malas. (¿A quién no le gusta perderse en un buen libro o película?) Pero estar constantemente distraído puede significar que te pierdas la magia de los pequeños momentos de la vida. Ya sea que estés saliendo con tus seres amados o disfrutando del sol y del aire fresco, aprovecha tu tiempo al máximo desconectándote de las distracciones sin importancia. Aquí te dejamos unas ideas que podrías probar.

Haz de la hora de la comida un momento más significativo. Deja a un lado las pantallas durante la cena y enfócate en conectarte con la familia.

 Ponle atención a la naturaleza. Ya sea caminar por el vecindario o escalar el pico más alto, deshazte de los auriculares para que puedas escuchar el sonido de la naturaleza.

 Calma tu mente. Cuando los pensamientos negativos alteren tu paz, anótalos en un papel, y deshazte de ellos.

Encuentra la quietud

Cuando tienes que hacer malabares con los trabajos, hacer encargos y luchar con los niños, es fácil perderse en el ajetreo cotidiano. Podrías pensar, “Estoy demasiado ocupado para estar consciente”. Y te entendemos. Pero practicar la conciencia plena no te tiene que tomar todo el día. El truco está en buscar pequeños momentos de quietud y tranquilidad, ¡te prometemos que sí existen!

Por ejemplo, concéntrate en tu respiración mientras te detienes en un semáforo, mientras estás en la ducha, o a la hora de acostarte a dormir. Después de unas semanas de hacerlo, empezarás a ver un cambio. Vivir conscientemente pronto se convertirá en parte de tu naturaleza, y te encontrarás haciendo tiempo todos los días para sentirte presente.

Practica yoga

La conciencia plena no se trata solo de estar quieto. Cuando practicas yoga, aprendes a practicar la conciencia plena a través de los movimientos. Mantenerte en sincronía con tu cuerpo y enfocarte en tu respiración te ayuda a concentrarte en el momento presente. Puedes usar los momentos entre estiramientos para reflexionar y meditar.

Como lo mencionamos anteriormente, la aromaterapia puede ayudar a dar indicios a tu mente de que es hora de estar presente. Te presentamos algunas ideas para agregar aceites esenciales a tu práctica de yoga.

  • Encuentra tu lugar feliz. Aplica una gota de Palo Santo en tu tapete de yoga y aspira su calmante esencia.
  • Concéntrate. Frota una gota de Incienso o Mirra en el centro de tu corazón para recordarte que debes abrir tu corazón y permitir que el amor entre.
  • Crea un entorno de calma. Aplica en tu difusor Hinoki, Pachulí y Royal Hawaiian Sandalwood™ para disfrutar de un aroma amaderado durante tu flujo de energía.

¿Cómo practicas la conciencia plena? ¡Déjanos saber en los comentarios!